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CALI, TU FERIA DEL LIBRO YA LLEGÓ

jULIANA LOZANO
17 oct 2017
3 Min. de lectura

Si usted no ha ido a la feria del libro de este año, déjeme decirle que se está perdiendo de mucho y además, necesita actualizar su agenda.

Le recomiendo que se vaya por alguna comida, que se siente y se disponga a leerme muy bien; esta vaina que le voy a contar le agradará tanto que hará que su alma experimente un cambio de emociones demasiado rápido, créame.

Empecemos, la feria inicia en la iglesia La Ermita se extiende por el boulevard y termina por los lados del Can. Como ya debe de saber, lector, el boulevard es actualmente un lugar muy recorrido por nosotros los jóvenes; así que si usted quiere llegar a la parte del Subway es obligatorio que primero pase por la feria del libro y aprecie el espectáculo de colores y carpas que hay por esta feria. La apertura de la feria fue el Jueves 12 de Octubre desde las 11:00am, hubo bastante gente, pero no se llenó hasta después de las 4:00pm. Querido lector, antes de seguir; respóndame una dudita… ¿Cuánto cree que oscila el valor de los libros en el marco de esta feria?

Imagino que su respuesta debe ser aproximadamente $20.000. Pues no, lamento decepcionarlo porque la mayoría de los libros de agrado para nosotros costaban entre $42.000 y $66.000. Para la mala suerte de los que solo disponían de $20.000 (como yo), les tocaba recorrer varios stands viendo si había aunque fuera un libro de su agrado con un precio que se ajustara a su bolsillo. Y claro que los hay, pero la mayoría son de temas que a uno no le interesan; pero si busca como loco, le aseguro, querido lector, que alguno le va a gustar. Usted se preguntará: “¿Y por qué los libros andan tan caros si se supone que estarían en rebajas?” Déjeme le explico; el asunto es que la Librería Nacional (y muchas más que también son muy recurridas) están en la feria, y como ha de suponer, eso es una competencia jodida. Pero vea, no se preocupe; que si estaban en un precio tan alto, es porque la mayoría estaban nuevecitos y bonitos.

Una lástima que cuando uno está joven suele estar de los más pelado de plata y los papás si a duras penas les dan para el pasaje. Aunque los libros estaban en su mayoría “muy caros” habían unos descuentos que (si usted es capaz de aguantar hambre todo el día) le caían como anillo al dedo, algunos les dejaban los libros en $35.000, y la mayoría ahí podían sentir que era su día de suerte. Ahora, dejando de lado la mala racha por los precios, cabe destacar que el ambiente de la feria estaba genial; usted (aunque no tenga plata) puede parchar por ahí con sus amigos, frescos, solo admirando el evento y el ambiente de la feria. Venga, querido lector, deténgase por un segundo y piense lo rico que debe ser ir a parchar un rato por la feria, ver los conversatorios, escuchar algunas opiniones y críticas de escritores. ¿No le emociona acaso? Porque a algunos sí, está usted invitado a pasarse un momentico por el boulevard y disfrutar de la feria. Le prometo que no se va a decepcionar, créame. ¡Aproveche, que esto solo ocurre una vez al año!