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CUANDO LA FICCIÓN QUEBRANTA LA REALIDAD.

JUAN SEBASTIA CUESTA P.
22 ene 2018
3 Min. de lectura

Hace una semana la cadena de televisión RCN, empezó a transmitir su novela sobre la vida de Jaime Garzón. Pero en la pelea del rating causó indignación.

Indignación, esa es la palabra que a diario se ha hecho parte de la vida de los colombianos en pleno auge de la post verdad. Pero no, en este caso no hay post verdad. Una vez puesta en emisión el primer capítulo de la telenovela producida por RCN la hermana de Jaime Garzón, Marisol Garzón hizo saber a los medios públicos su indiferencia con la novela. Indiferencia e indignación, que según ella nace en primera parte porque a ella nunca firmó para realizar la novela puesto que ella es quien tiene en su custodio legal el nombre comercial de Jaime Garzón. En segunda porque relativamente muestran una ficción que como en todos los casos se sobrepone a la realidad causando una serie de mentiras y desinformando a la audiencia.

Esto fue explicado en una cita que hizo ella a los medios en una biblioteca de Bogotá junto con su abogado, informando también a los medios que ya había interpuesto la demanda hacia el canal RCN, pero estos aún no responden a la demanda.

Una vez entendidos estos dos puntos principales ya se empieza a analizar el caso que está dando polémica hoy al país. No es para nadie un secreto que RCN y su mayor enemigo CARACOL, son dos canales que se disputan el rating y no sería raro que intenten vender una novela o un "homenaje", como ellos han hecho ver al país su producto audiovisual. De principio yo pensé que de verdad iban a tratar de homenajear a Jaime Garzón, pues fue Jaime quien creyó que nuestro país tenía salvación, pero no, evidentemente ni eso lo pudimos hacer bien. El pueblo dejó morir a Jaime y por el pueblo mismo estamos sumergidos en esta miseria. Nos importa un carajo lo que pasa en el país porque siempre lo he dicho y lo seguiré diciendo; "el pueblo solo está para quejarse, pero no para tomar una decisión".

Aunque los hermanos de Marisol firmaron ya están empezando a percatarse de que la novela es una falacia. Alfredo Garzón, hermano de Marisol y de Jaime Garzón dio a conocer su descontento y se arrepintió de haber firmado el permiso para sacar al aire la telenovela. En una columna que realizó para El Espectador mostró su indignación, mencionando en algunas partes a Alfredo le parece una inconsistencia lo que mostraron en el primer capítulo a Jaime lanzando acusaciones al aire, cosa que pondría en riesgo la integridad de sus compañeros y cosa que además nunca hubiese hecho Jaime. Muestran al padre de Jaime como fundador de una misoginia con el alcohol y las mujeres y además errores cronologicos.

Por esto y más es donde la ficción empieza a desdibujar y quebrante la realidad y es triste e indignante que aún con un heroe patrio intenten vender esa famosa pornomiseria, mostrada en una novela que a empezado a transgredir la realidad y la censura se verá marcada probablemente. Ese mismo canal que mostraba como héroes a los hermanos Castaño, ahora muestran la supuesta realidad de un importante activista que su herramienta era el humor y su importante afán de decir las cosas sin censura.

Por último y para rescatar lo importante de la denuncia que interpuso Marisol Garzón es que la Ley 1491 de 2011 decreta en el artículo 2, decreta que por orden del Gobierno Nacional a través de Señal Colombia se realizará la recopilación, selección y publicación de la vida y obra de Jaime Garzón Forero. Entonces, ¿por qué mejor no pensaron en un documental y lo hicieron en asociación de Señal Colombia? Ah, claro, es que lo que nos importa es el rating, la pornomiseria y vender vender vender... Como siempre, un aplauso RCN y un aplauso país sumergido en la miseria.